Protestas en Perú no ceden y amenazan la estabilidad económica del país

Perú, que ha pasado de una crisis política a otra, estalló a fines de la semana pasada en protestas que, hasta este martes, dejan al menos ocho personas fallecidas, enfrentamientos en todo el país, una decena de regiones paralizadas por bloqueos y tres aeropuertos cerrados por el ingreso de manifestantes.
Esa agitación amenaza cada vez más con descarrillar la estabilidad económica de uno de los países con mayor crecimiento de América Latina. Las agencias como S&P y Moody’s han advertido de rebajas al país, mientras las movilizaciones afectan a las principales minas del segundo productor de cobre del mundo.
Según cifras que la Cámara de Comercio de Lima (CCL) dio a DFSUD.com, las 10 zonas afectadas por las protestas (de un total de 24) aportan cerca del 30% del PIB nacional y concentran el 26,3% del empleo formal.
Expertos ya hablan de escasez de combustible, impacto en las exportaciones y en las ventas del comercio, ad portas de la Navidad.

Pese a toda la convulsión, los mercados locales se mantuvieron estables. La Bolsa de Valores de Lima bajó 0,68%, mientras que la paridad dólar-sol peruano se ubicó en 3,83 puntos, un 0,29% menos que la jornada anterior. 

Impacto económico

Estimaciones del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la CCL arrojan que los conflictos sociales afectan el desenvolvimiento de los negocios y disminuyen las ventas por día en 1.728 millones de soles, equivalentes a US$ 455 millones, en sectores como servicios (US$ 151 millones) y comercio (US$ 119 millones).

“Urge que el nuevo gabinete ministerial, que preside Pedro Angulo Arana, inicie rápidamente un trabajo coordinado que permita recuperar la estabilidad política, retomar el crecimiento económico y la generación de puestos de trabajo que tanto requiere nuestro país. El Consejo de Ministros debería presentarse en el más breve plazo ante el Congreso de la República para exponer la política general del gobierno y recibir el voto de investidura, a fin de que asuma la tarea de reorganizar el manejo del Estado y enfrentar problemas tan graves como la crisis económica y la inseguridad”, apuntó Oscar Chávez, jefe del organismo.
Desde el ámbito de los transportistas interprovinciales se señala que, con los bloqueos de rutas, se está dejando de movilizar cerca de un millón de pasajeros diarios, lo que implica una pérdida de 50 millones de soles (US$ 13 millones).En tanto, el sector exportador, en especial el frutícola -con Perú como el mayor exportador de arándanos del mundo- también podría verse afectado de prolongarse la agitación social, dado que se encuentran en periodo de cosecha.
Gabriel Amaro, director ejecutivo de la Asociación de Gremios Productores Agrarios de Perú (AGAP), estimó que, en los seis días de bloqueos de vías y paralización de actividades agroindustriales, las empresas del ramo acusan pérdidas por sobre los US$ 100 millones, y la afectación a más de 150 mil trabajadores que dependen de esa actividad.
Recordó que cada mes, el sector realiza exportaciones cercanas a los US$ 800 millones.
La situación podría repetirse con la minería, lo que impactaría en un par de décimas menos al indicador mensual de actividad económica de la nación andina. “Si (las protestas) se extienden hasta las fiestas, el efecto podría resultar en un magro crecimiento para la economía en diciembre; posiblemente una contracción pequeña. El efecto más dañino que podrían tener es el de contaminar las expectativas del sector privado para 2023”, dijo Jaime Reusche, vicepresidente de riesgo soberano de Moody’s.
En tanto, la Cámara de Comercio de Arequipa dijo que ve con preocupación que la conexión aérea esté paralizada, pues ya son tres los aeropuertos cerrados. También se teme se gatille la escasez de combustible.

Señales de calma

Mientras el país está sumido en ese caos, la nueva presidenta, Dina Boluarte, instaló este martes el gabinete de gestión crisis y anunció que se está evaluando disponer el estado de emergencia a nivel nacional (hasta ayer era solo en Arequipa) para evitar más desmanes.
En positivo también se mostró Sebastián Herraiz, director de la Cámara Peruano-Chilena de Comercio, quien aseguró que “la élite empresarial está tranquila”. “Obviamente existe mucha cautela y temor, pero lo que prima es el optimismo. De hecho, se están reactivando proyectos que estaban parados con Castillo”, dijo.

Efecto elecciones

Consultado respecto del llamado a adelantar elecciones a 2024 por parte de Boluarte, Reusche, de Moody’s, dijo que las perspectivas podrían mejorar dado que “la comunidad empresarial le va a dar la bienvenida a un gobierno un poco más competente, ordenado y menos caótico que el de Pedro Castillo”. Todo esto, si es que las autoridades políticas logran calmar la situación y adelantar las elecciones. 

“Navegar esta crisis va a ser muy delicado y va a requerir mucho tanteo por parte de este nuevo gobierno; si lo hace podría ser favorable desde el punto de vista económico”, precisó. 

Sobre Boluarte, Reusche aseguró que desde Moody's esperan que esta fuera una administración débil, pero “con una gran oportunidad de tender puentes y cumplir el rol de transición hacia unas elecciones generales. La clave será qué tan dispuesta está la clase política a aceptar el adelanto de las votaciones tal como se propuso antes. Eso es parte de la incertidumbre que estamos evaluando en pos de revisar las perspectivas del país”, apuntó.